Invertir o Malgastar el Tiempo

Todos disponemos del mismo tiempo el cual transcurre sin detenerse. El tiempo se invierte o se malgasta. No se va a paralizar por nuestras excusas. El tiempo es igual para todos porque nuestros días tienen las mismas veinticuatro horas. En que lo usamos está la diferencia o se invierte o simplemente se pierde. Malgastar el tiempo es desperdiciarlo de forma inadecuada en asuntos que en nada aprovechan. Invertir tiempo es sacarle provecho u obtener eventualmente ganancia.

“La excusa más utilizada de todos los tiempos para la procrastinación es decir que no tenemos tiempo”

La Biblia enseña que todo tiene su tiempo el cual es irreversible y es un recurso irrecuperable. Debemos ser buenos mayordomos del tiempo ya que si estamos dentro del Propósito Eterno de Dios entonces debemos hacer buen uso de uno de los principales recursos que Dios nos dio, el tiempo para aprovecharlo al máximo.

“Los niños no tienen consciencia del tiempo. Los jóvenes no le dan importancia. A los adultos no les da tiempo. Los ancianos viven arrepentidos de no haber aprovechado bien el tiempo”

La falta de entendimiento acerca de la administración del tiempo nos lleva a malgastar unos de los recursos más valiosos que Dios nos ha dado.

“Presten atención, ustedes que dicen: «Hoy o mañana iremos a tal o cual ciudad y nos quedaremos un año. Haremos negocios allí y ganaremos dinero». ¿Cómo saben qué será de su vida el día de mañana? La vida de ustedes es como la neblina del amanecer: aparece un rato y luego se esfuma. 15 Lo que deberían decir es: “Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello” – Santiago 4:13-15 NTV 

Nuestro tiempo de existencia en la tierra es rápido y fugaz. Nuestra vida natural sólo tendrá sentido cuando comprendemos el motivo por el cual Dios decidió crearnos. El por qué usted nació en este tiempo y no en otro tiempo no es lo importante, sino para qué nació en la presente generación.

Nuestro Señor Jesús tenía doce años cuando dice: ¿No sabíais que en los negocios de mi Padre me es necesario estar? (Lucas 2:49 RV60) Ya a los doce años tenía claro cual era su propósito de Su existencia terrenal.

Si nosotros no tenemos claro que el Propósito Eterno de Dios para nosotros es Su Hijo Cristo, no vamos a poder definir en qué vamos a invertir nuestro tiempo de vida, ni tampoco sabremos cómo manejar de manera correcta nuestro dinero, nuestros negocios, nuestras relaciones, familias, etc. Como consecuencia estaremos bajo el control y dominio de todos los asuntos naturales.

¿Podemos ser empresarios en lo natural estando en Cristo? Claro que sí. En esencia, la buena mayordomía de nuestro tiempo es nuestra oportunidad dada por Dios para administrar sus abundantes talentos y dones que nos ha dado. Por ejemplo, los mejores empresarios en la tierra deben ser aquellos que sirven en el Propósito Eterno.

“Para ser confiables en el Propósito Eterno debemos madurar en la mayordomía de todo lo que Dios nos ha asignado incluyendo el tiempo”

“Señor, recuérdame lo breve que será mi tiempo sobre la tierra. Recuérdame que mis días están contados, ¡y cuán fugaz es mi vida! La vida que me has dado no es más larga que el ancho de mi mano. Toda mi vida es apenas un instante para ti; cuando mucho, cada uno de nosotros es apenas un suspiro”- David (Salmo 39-4-5 NTV)

Si algo debiéramos anhelar es crecer en sabiduría y entendimiento espiritual. La sabiduría nos empodera para ser emprendedores que existen para vivir de una manera balanceada y productiva.

“Cuanta más iluminación del Propósito Eterno tengamos, más efectivo seremos como mayordomos de todo lo que Dios nos ha dado”

Creo que podemos ser emprendedores, pero que no vean a Dios como un socio de negocio, sino como el dueño de todo. Dios no es un amuleto de suerte para que nos vayan bien en los negocios terrenales. Todo es de Dios y es para su Gloria.

Mi hermano y amigo el Apóstol Juan Ballistreri de Argentina en uno de sus libros titulado “Señores del Tiempo” dice: “La falta de revelación acerca de la administración correcta del tiempo lleva a las personas a polarizarse en su manera de concebir la vida. Encontraremos personas desesperadas porque se les va el tiempo de las manos y otros que ni siquiera son conscientes del transcurso de las horas. Por esta razón, no se puede caminar en el Uno (refiriéndose a Cristo) si primero no arribamos a un acuerdo acerca del uso correcto de nuestro tiempo de vida. Esto no tiene que ver con acordar una agenda en común, porque cada uno de nosotros manejamos nuestra agenda según la asignación que recibimos. El punto en cuestión es tener la misma concepción acerca del tiempo. Se predica hasta el cansancio que debemos entregarle nuestra agenda a Dios y siempre habrá́ personas al final que pasarán al frente a consagrarse arrepentidos y llenos de lagrimas. Sin embargo, al llegar a sus casas volverán a tomar la agenda de siempre y todo seguirá igual”.

Reflexionemos si estamos invirtiendo el tiempo o lo estamos malgastando. Nuestra vida natural no debe estar determinada por las circunstancias que enfrentamos diariamente, sino por la calidad de nuestras decisiones y de lo que hacemos con el tiempo.

“There’s an opportune time to do things, a right time for everything on the earth” (Ecclesiastes 3:1 MSG) “Hay un momento oportuno para hacer las cosas, un momento adecuado para todo en la tierra” (Eclesiastés 3:1 MSG traducción al español)

Vivamos consciente que todo el tiempo cuenta.  

¡Gracia y Paz!

2 Comentarios Agrega el tuyo

  1. Elena dice:

    Tremendo, Dios lo siga usando y bendiciendo.

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  2. María Pérez dice:

    Disfruto de sus exposiciones. Ya sea predicación o escritos como este. (Si viviera cerca, sería una de sus ovejas)
    Siga metiéndose con Dios y recibiendo revelación. Estos tiempos son señalados como tiempos de poder conocerle y alcanzar su salvación. Porque el tiempo se acorta.
    Bendiciones

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